¿Qué alternativas medioambientales existen a las bolsas de plástico convencionales?
La enorme proliferación de las bolsas de plástico en los últimos años ha planteado un problema global sobre gestión de residuos.
Por eso, hoy en día, el material de las bolsas de plástico está sometido a criterios legales de sostenibilidad, concebidos para reducir el impacto de este producto de uso común en la naturaleza.
La necesidad de adaptarse a la legislación ha llevado al desarrollo de nuevos materiales para las bolsas de plástico. Si quieres conocerlos, solo tienes que seguir leyendo:
Evolución de las bolsas de plástico
Históricamente, el material líder indiscutible para la fabricación de bolsas de plástico era el polietileno.
Este tipo de plástico se comercia desde hace más de 50 años, pero, a principios de los 80, empezó a extenderse el uso de papel y otros materiales reutilizables como alternativas de fabricación. ¿El motivo?
Los hábitos de consumo de los países desarrollados se estaban extendiendo a todas las partes del mundo y la emisión de plásticos global empezó a ser motivo de alerta.
Hoy en día, hemos llegado a la media de unas 230 bolsas de plástico por año y habitante.
Esta cifra desorbitada está provocando que miles de toneladas de plástico acaben en los mares, océanos y otros lugares de la naturaleza, debido a que nuestros sistemas de recogida de residuos o de reciclaje siguen siendo deficientes.
La situación lleva años suscitando una preocupación que no entiende de fronteras. Por ello, la industria química lleva cierto tiempo tratando de implementar alternativas verdes en el mercado.
Pero, ¿a qué nos referimos con alternativas verdes?
Si estás familiarizado/a con temas medioambientales, sabrás que existen diversas estrategias con el fin de plantear alternativas sostenibles.
Los materiales alternativos al polietileno presentados en el mercado se centran en alguna de estas estrategias o incluyen varias de ellas.
Estrategia 1: reutilizar las bolsas
Una de las estrategias medioambientales consiste en alargar la vida del producto.
En este sentido, se están fabricando bolsas de polietileno de baja densidad y de otros tipos de polímeros que permiten una reutilización de la bolsa.
Es obligatorio que, en su etiquetado, se indique la categoría del material y las certificaciones de calidad a las que se acogen. Y como no podría ser de otro modo, estas bolsas están también sujetas a las normativas actuales sobre protección del medio ambiente.
Estrategia 2: reciclar las bolsas
Hace tiempo que alargar la vida de un producto ha dejado de ser suficiente si queremos hacer algo por el medioambiente.
La posibilidad de reciclar un material se ha vuelto una cualidad básica indispensable en cada bolsa que se comercializa, aunque existen distintos grados de dificultad o coste.
En realidad, sigue existiendo una dificultad real para la recogida y la gestión de residuos para convertirlos en materia prima para nuevos productos. Y, aunque existen cada vez más campañas de concienciación en este sentido, todavía nos queda mucho camino por recorrer.
Estrategia 3: convertir las bolsas en hidrosolubles
¿Y si, con el tiempo, las bolsas de plástico se disolvieran con la acción del agua?
Existen varias líneas de investigación en este sentido, aunque la hidrosolubilidad va un poco en contra de la naturaleza general de los plásticos. Estos materiales suelen ser muy resistentes a los efectos disgregadores del agua y suelen incluso presentar propiedades impermeables.
Estrategia 4: usar bioplásticos
Con bioplásticos nos referimos a un tipo de plásticos que se derivan de productos vegetales, como el aceite de soja, el maíz o la fécula de patata. Como en el caso anterior, su sostenibilidad se baja en garantizar un retorno ecológico al medio natural.
¿Qué hacemos desde SIMAPACK para garantizar la sostenibilidad?
Todos nuestros productos de embalaje son 100% reciclables y están producidos por empresas nacionales, lo que nos permite una trazabilidad y unos controles de calidad más exigentes.
Además, trabajamos con gestores de residuos certificados que garantizan la correcta gestión de los residuos.
Y como sabemos que muchos clientes comparten nuestro compromiso hacia el medioambiente, les ofrecemos acompañamiento para elegir el producto que mejor encaja con sus necesidades con la intención de reducir residuos, materiales utilizados y costes en su final de línea.
Si tú también quieres optimizar tus procesos de embalaje y apostar por el medioambiente, puedes contactarnos a través del enlace siguiente.